Escuela de Espectadores: temporada de cosecha

Al finalizar la edición 2017, el espacio que coordina el crítico, historiador y docente porteño Jorge Dubatti vio los frutos de dos años de intenso trabajo.   La Escuela de...

Escuela de Espectadores: temporada de cosecha

Al finalizar la edición 2017, el espacio que coordina el crítico, historiador y docente porteño Jorge Dubatti vio los frutos de dos años de intenso trabajo.

 

La Escuela de Espectadores, iniciativa generada desde el Centro Cultural Provincial, se plantea como un espacio innovador en el mapa local de instancias de formación.

Generado en 2016 con el propósito de promover la participación de los públicos, la formación de audiencias y la inclusión de grupos sociales con menor acceso a las ofertas y espacios artístico-culturales, el proyecto comenzó a dar sus primeros frutos este año.

En este sentido, con el propósito de promover un espacio de pensamiento crítico, generar nuevas miradas y nuevas producciones escritas acerca del acontecimiento teatral; se originaron las primeras críticas teatrales de los alumnos de la escuela. A raíz de esto, surgió la inquietud de abrir un espacio web donde los alumnos pudieron compartir sus escritos, a los que tuvo acceso tanto el público en general como los artistas.

En comparación con el primer año de trabajo, en 2017 hubo una cantidad considerable de visitas a diferentes espectáculos, ensayos teatrales y espacios culturales, tales como el Paseo de las 3 Culturas (espacio Abierto), Centro Cultural Provincial Teatro de La Abadía, Centro Cultural Roma y Teatro Municipal, entre otros.

Además se amplió el campo de análisis de los espectáculos, abarcando no sólo el de las poéticas teatrales sino también aquellas propuestas con gran incidencia en el campo social, cultural y pedagógico, como el proyecto de teatro en la cárcel, teatro callejero para espacios públicos abiertos, identidad y autogestión del teatro independiente y teatro en contextos educativos, entre otros.

Por otra parte, con la idea de generar un espacio de disfrute y comprensión teatral abierto a todos los públicos más allá de los estudiantes y entendidos en la materia, se ofreció la propuesta a diferentes agrupaciones, sindicatos, gremios y colegios, con promociones económicas especiales, lo que se vio reflejado en la cantidad de alumnos activos.

Se originó la credencial de la Escuela de Espectadores, a través de la cual los alumnos tuvieron acceso con promociones económicas especiales en todas las salas de la ciudad, donde pudieron ver espectáculos de teatro independiente.

Dentro del marco del Festival Internacional de Clown, el cierre de ciclo de la Escuela contó con la presentación del libro de clown «Cándida Da» de artistas cordobesas. Hubo devoluciones escritas de los alumnos y charlas e intercambio con los artistas.